Psoriasis
9 julio, 2016Las cinco preguntas más frecuentes de los pacientes con alopecia areata
11 julio, 2016El sol, con los cuidados debidos y tomándolo con precaución, es una fuente imprescindible para la piel. Pero mucha gente, por el afán de ponerse moreno, no toma las medidas adecuadas, pudiendo desembocar en consecuencias nefastas como cáncer de piel. Por ello, la Academia Española de Dermatología y Venereología quiere remarcar la importancia de tomar el sol con consideración y precaución.
El Presidente de Honor de la AEDV, el Dr. Julián Conejo Mir, recuerda que “el sol es una radiación electromagnética que, cuando llega a nuestra piel, va a producir mutaciones en nuestro ácido nucleico, nuestro DNA, y esas mutaciones al principio, pueden ser anuladas por nuestro organismo”.
Especifica que “cualquier persona cuando va a la playa cada día desarrolla un cáncer de piel, pero nuestro sistema defensivo, si funciona bien, lo anula”.
El problema, incide, es que “esa cremallera suba y baje tanto que puede que se atasque. Es entonces cuando la proteína P53 muta y no funciona, dando lugar a la aparición del cáncer de piel”. Se trata así de “algo relativamente frecuente para el ser humano, ya que somos primates blancos. Si fuésemos de piel negra, la radiación solar no dañaría tanto nuestra piel.
No obstante, “un poco de sol siempre es bueno”, ahí está la controversia. “Exponer al sol durante 5 minutos a la semana un brazo, pierna, cara, etc, es esencial para fabricar vitamina D y evitar así las infecciones, cáncer de pulmón, de próstata o de mama”. Por tanto, asegura que “un poco de sol es bueno pero siempre con moderación”.
También matiza que “todo es cuestión de acumulación”. Hay territorios donde es menos frecuente tomar el sol. “Poco sol todos los días es tan acumulable como mucho sol de vez en cuando”. Por ejemplo, las “personas rubias con ojos azules que vienen del Norte de Europa porque les encanta tomar el sol en nuestras costas desarrollan muy rápido cáncer de piel. No porque nuestro sol sea muy fuerte, sino porque ya traían de sus ciudades radiación solar. Por tanto, la acumulación es la misma”.
Así, el Dr Conejo Mir insiste en que es bueno ponerse protección solar, pero no es suficiente. De hecho, especifica que “en el mundo se gasta más en cosmética y protectores solares que en armamentística en muchos países”. Realmente, “el protector solar se ha convertido en el cosmético número uno”. Además, aconseja también ponerse sombrero, camiseta y evitar el sol de mediodía o no pasear en bicicleta en las horas de más sol. Así afirma que “el hábito es tan importante como la propia crema”. Según estadísticas, “apenas el 50% de los que van a la playa han comprado protector solar y, lo más importante, de ellos el 50% no llegan a ponérselo, que es todavía peor”.