La piel, un mapa del coronavirus
1 febrero, 2021Piel, adaptarse o morir
16 febrero, 2021La pandemia COVID-19 no sólo está dejando miles de muertes y afectados por el virus SARS-COV-2 sino que también está mermando la atención de otras enfermedades. El miedo a acudir a las consultas médicas y los retrasos en las agendas de los hospitales están propiciando que muchos pacientes no acudan a tiempo al especialista. Este es el caso de las personas que tienen un melanoma, según los datos de una encuesta realizada a más de 700 dermatólogos de todo el mundo.
La Coalición Global para la Defensa del Paciente con Melanoma (la alianza de organizaciones benéficas relacionadas con el melanoma a cargo de la encuesta) quería conocer cómo estaba impactando la pandemia en el diagnóstico del melanoma, el cáncer de piel más grave y que si se diagnostica a tiempo se puede curar, pero que si no se trata adecuadamente puede conducir a la muerte. Para ello pidió la ayuda a diferentes instituciones y estamos de 36 países. España participó a través de la colaboración de la Academia Española de Dermatología y su Fundación Piel Sana.
De esta manera y tras analizar las respuestas de 734 dermatólogos de 36 países distintos, se ha podido conocer que, en comparación con las revisiones dermatológicas realizadas habitualmente en un año normal, los dermatólogos calculan que una quinta parte (un 21 %) de los melanomas no se han diagnosticado en 2020, con un tercio (un 33,6 %) de incomparecencias a las consultas a causa de la pandemia.
Si consideramos estas cifras, además de las tasas de incidencia de melanoma más recientes de la Organización Mundial de la Salud, la encuesta parece indicar que, en todo el mundo, más de 60.000 melanomas no se han diagnosticado y que esta cifra, en España, alcanza los 1.113 casos sin detectar
| «Los confinamientos necesarios durante la crisis de la COVID, además de la carga adicional sobre los sistemas sanitarios, han llevado a que se pierda una proporción preocupante de revisiones profesionales de la piel. Por lo tanto, con esta tendencia que parece que vaya a continuar hasta que todos salgamos de la pandemia, cobra especial importancia que la gente revise su propia piel para ver si presentan melanomas», declara el Dr. Agustín Buendía Eisman, responsable de campañas de la Fundación Piel Sana de la AEDV, que lleva más de 20 años participando en la concienciación de la prevención del cáncer de piel a través de su campaña Euromelanoma.
Desde la AEDV, se ha venido insistiendo en estos meses de pandemia en el riesgo de retrasar el diagnóstico del cáncer de piel. El pasado mes de abril se dio a conocer los datos de un estudio, realizado con el apoyo de la Academia, que mostraban que un retraso de tres meses en el diagnóstico de los carcinomas de células escamosas suponía una pérdida en la supervivencia de hasta 8 puntos a los 5 años y de 13 puntos en el caso de los melanomas. Durante el periodo de confinamiento, en España se redujeron en un 40% los tumores intervenidos y aumentó el número de tumores gruesos de piel, tipo melanoma y no melanoma.
El golpe que la pandemia COVID-19 está asestando puede provocar, por tanto, un vuelco en las cifras de supervivencia de estos pacientes a consecuencia del diagnóstico tumoral en fases más avanzadas. Por este, desde el Grupo Español de Dermato-Oncología y Cirugía (GEDOC) de la Academia de Dermatología, se pide actuar frente a los riesgos que entraña que la incidencia del cáncer cutáneo siga creciendo si se frena la actividad sanitaria o si estos pacientes, especialmente los mayores con melanoma u otro tipo de cáncer de piel, no acuden al dermatólogo.
Como medida para favorecer la detección precoz del cáncer de piel, la Coalición Global para la Defensa del Paciente con Melanoma ha impulsado dos herramientas para la autoexploración de la piel:
- Una aplicación con asistente digital activado por la voz «Skin Check»: disponible en las plataformas Alexa y Asistente de Google de Amazon. La aplicación orienta a los usuarios sobre qué deben buscar e incluye los siete pasos para realizar una exploración de la piel en todo el cuerpo. El asistente termina ofreciéndole que establezca un recordatorio mensual periódico para la exploración. Una vez habilitado, los usuarios pueden simplemente pedirle a Alexa o Google: «Abre Skin Check».
- Un vídeo para la autoexploración de la piel: con un objetivo similar a la aplicación, el vídeo cubre la regla del ABCDE del melanoma y los siete pasos para revisar el cuerpo. En la película, se incluyen pausas entre los siete pasos, de modo que quien lo ve puede simplemente llevar su teléfono o tableta al baño, reproducir el vídeo y seguir las instrucciones en tiempo real.
Para activar y usar la aplicación, debe ir a https://www.amazon.com/dp/B08GLPWPX5/ y el vídeo está disponible en https://youtu.be/G2dUeCH9dzA.
«En la lucha contra el cáncer de piel tipo melanoma, la detección y el tratamiento precoces son fundamentales. Tanto la aplicación activada por voz como el vídeo son de uso gratuito, por lo que animamos a todo el mundo a encontrar solo 10 minutos al mes y que la autoexploración de la piel forme parte de su práctica habitual», añade la Dra. Ángeles Flórez Menéndez, dermatóloga miembro del equipo de Euromelanoma en España.
En esta situación, la Fundación recuerda la existencia y utilidad de dos aplicaciones de origen español, gratuitas y disponibles para iOS y Android, relacionadas con la piel y el sol: UV Derma y e-Derma. Aplicaciones desarrolladas e impulsadas por la AEDV para mejorar la prevención y el diagnóstico precoz del cáncer de piel.
UV Derma ofrece en tiempo real los valores del índice ultravioleta de una localidad en el momento de la consulta, el tiempo que una persona puede estar al sol sin quemarse y el que necesita para generar la suficiente dosis de vitamina D.
Por su parte e-Derma, además de la información sobre índice ultravioleta, está desarrollada para poder realizar un registro fotográfico de diferentes zonas del cuerpo que se puede consultar y comparar cada mes. Cuando se detecte un lunar distinto o que haya crecido, el usuario puede establecer un canal de comunicación con el dermatólogo evitando problemas de movilidad y reduciendo los tiempos de diagnóstico o tratamiento.
«Desde la AEDV y su Fundación, queremos contribuir en la difusión de herramientas que permitan la autoexploración de la piel para poder detectar de manera precoz el cáncer de piel y no retrasar la consulta con el dermatólogo, algo vital en el pronóstico», concluye el Dr. Agustín Buendía Eisman.