Primavera para la piel
30 marzo, 2022La Comunicación en Dermatología
3 mayo, 2022La agresión del actor Will Smith al presentador de la Gala de entrega de los Oscar, Chris Rock, por una desafortunada alusión a la alopecia que sufre la esposa del primero, Jada Pinket, ha puesto súbitamente de moda entre el gran público una afección dermatológica, cuya incidencia afecta nada menos que al 20% de las mujeres adultas y cuya tendencia, además, se muestra claramente al alza. Los porcentajes se disparan hasta el 64% entre las embarazadas a los 4 o 5 meses después de dar a luz, lo que se conoce como alopecia post-parto.
Aunque, en la mayoría de los casos, la alopecia femenina tiene un origen hormonal, también pueden influir otros factores, como la predisposición genética o el estrés. En los últimos años se viene detectando el aumento de la caída de pelo entre adolescentes, lo que puede atribuirse, además de a los cambios hormonales, a unas dietas insuficientes, incentivadas por el culto estético a la delgadez. Y también se comprueba la existencia de más casos de alopecia frontal fibrosante asociados a estados de ansiedad o depresión, mayoritariamente en mujeres menopáusicas.
| “Como medida preventiva se recomienda una dieta sana y equilibrada, una atención constante al cuidado del cabello utilizando productos recomendados por dermatólogos”
La alta frecuencia de episodios de caída del cabello (casi todas las mujeres tienden a sufrirlos en algún momento de su vida) puede derivar, además de en la correspondiente alteración estética, en ansiedad o trastornos psicológicos. Cualquier síntoma debe ser puesto en conocimiento y tratado por un dermatólogo, si se quiere ahorrar dinero y eventuales complicaciones, muy frecuentes si se recurre a soluciones como el consejo de personas sin cualificación o se utilizan productos que aseguran, fraudulentamente, una curación milagrosa.
Como medida preventiva, se recomienda una dieta sana y equilibrada, una atención constante al cuidado del cabello, utilizando productos (incluidos los cosméticos) recomendados por el especialista. Y recordar que el uso de recursos para mejorar la estética (planchas, rizadores, etc.) debe supeditarse siempre a preservar el buen estado sanitario del cabello.