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Trainer-Coach Apreciativo |
“Mi objetivo es poner toda mi experiencia, capacidad y potencialidad al servicio de aquellas personas y empresas dispuestas a construir un futuro mejor, para ellas mismas, sus trabajadores y todos los grupos de interés implicados, desde un enfoque APRECIATIVO”
1. ¿Por qué es tan importante dejar de caer en el victimismo constantemente?
En mi opinión, el victimismo es un estado de inmovilismo e inacción que no conduce a ninguna parte. La persona que se considera víctima no suele hacer nada para que “algo” cambie. Simplemente, se queda esperando a que algo ocurra.
De esa forma, no ejerce su libertad de acción y queda condicionada a lo que venga. Lo curioso de todo esto es que, si ocurre algo “malo” no se sorprenderá. Es más, dirá que lo esperaba pues, no en vano, se considera una víctima.
Pero si ocurre algo “bueno”, desconfiará, por lo que le costará apreciarlo y más aún, disfrutarlo. Para una persona que adopta el papel de víctima, se hace complicado ser feliz o sentir satisfacción por algo, debido a su escogida incapacidad para mirar más allá del rol que ha elegido desempeñar.
2. ¿Qué características tienen en común los enfermos dermatológicos en su estado anímico?
Puede que la baja autoestima sea el principal escollo a salvar. La piel es una de nuestras “envolturas” externas y por ello queda expuesta a la mirada del resto de personas con las que nos relacionamos.
Si esta piel está enferma y muestra su “dolencia” al mundo, el paciente puede quedar vulnerable y de alguna forma sentirse “indefenso” ante la mirada de los demás…
Me atrevería a decir que no es tanto lo que otros puedan, o quieran ver, en los pacientes dermatológicos, sino que, quizás, lo más importante para la afectación de su propia autoestima, es lo que el paciente haya decidido ver cuando él mismo se mira, esperando incluso que los demás lo “miremos” de la misma forma.
3. ¿Qué le recomendaría tanto a pacientes como a cuidadores para que se miren de forma apreciativa?
Les animaría a invertir la regla del 80-20, por la cual, al observar una situación, persona o cosa, aproximadamente el 80% de lo observado suele estar repleto de cosas negativas y, sin embargo, sólo el 20% restante (o incluso menos…) corresponde a las cosas positivas que somos capaces de apreciar.
Y es que, actuando como expertos en observar lo peor de lo que es, lo que hacemos es amplificar lo peor (¡lo malo acaba haciéndose TERRIBLE!…)
¿Por qué no, entonces, elegir amplificar lo mejor de lo que es y apreciar, de cada situación, cosa o persona, aquello que le da valor y vida?
4. La aceptación es un ejercicio de honestidad y respeto hacia uno mismo, ¿Por dónde empezar a trabajar? ¿Qué le recomendaría a los pacientes con problemas dermatológicos?
Sugeriría empezar a trabajar la mirada apreciativa.
La pregunta clave es: ¿Qué ves cuando te miras?
Esa conversación interna que decidimos entablar “cara a cara”, con nosotros mismos es crucial en el proceso de aceptación de uno mismo. No se trata de negar la realidad, se trata de hacer prevalecer lo que nos hace excepcionales, únicos, diferentes, fuertes…; sobre lo que ya sabemos que tenemos que mejorar.
El tipo de discurso que empleemos con nosotros mismos será determinante para inclinar la balanza hacia un lado u otro. Nos mostrará cuán honestos y respetuosos, somos capaces de ser con nosotros mismos.